¡Hay que ver lo que da de sí una obra mal proyectada!
Efectivamente, eso es en definitiva la famosa Torre Pendente, todo un símbolo de la Bella Italia.
Más de una vez se ha temido por el derrumbe definitivo del monumento aunque, en contra de todas las leyes de la física y con un poco de ayuda por parte de obreros y algunas casualidades, ahí sigue en pie… y menos inclinada que nunca. Pero, ¿qué te parece si echamos un vistazo a todo lo que necesitas saber sobre la Torre de Pisa?
Aquí podrás ver una infografía y un texto que contiene muchos secretos y consejos para poder disfrutar de una de las plazas más bonitas del mundo.
Si no te llega con todo esto… siempre puedes elegir uno de los viajes por la Toscana que tenemos preparados para conocer esta región! Si te interesa conocer también 5 Terre puedes elegir este otro!
1 – Torcida desde el principio
Como te contábamos al principio, la inclinación de la Torre de Pisa se debe, en realidad, a un error del arquitecto. Existe cierta controversia sobre quién fue el arquitecto que la comenzó, en la segunda mitad del siglo XII. Lo cierto es que nada más comenzar la primera parte de la obra, aquel monumento empezó a desviarse.
La razón parece estar más que clara. La torre se sujetaba sobre unos cimientos de apenas tres metros de profundidad y encima nadie tubo en cuenta la calidad del terreno, que en Pisa es muy pantanoso.
De hecho Pisa era un “Repubblica Marinara”, es decir unas de las 4 potencias navales del medievo italiano, gracias a su puerto muy bien protegido en el estuario del río Arno. Pero a causa de los restos que ha ido acumulando el mismo río, el mar se ha movido a más de 10 kilómetros de distancia. Eso hace que la llanura de Pisa y sus alrededores sea muy blanda y muy pantanosa… y poco apta para construir edificios muy altos.
Así que estos ingenieros fueron tan listo que decidieron construir una torre encima de un terreno muy poco sólido, por lo que un corrimiento de tierras hizo que la emblemática Torre de Pisa se ladeara hacia el norte cuando se estaba trabajando sobre la tercera planta.
2 – Dos siglos para terminarla
Casi 180 años se emplearon, repartidos en tres períodos, para levantar la Torre de Pisa. Bien es cierto que el proyecto estuvo parado casi un siglo, debido a las guerras de principados tan de moda en la Italia de aquellos tiempos. ¡Y menos mal! dirían algunos, porque gracias a ese lapso de tiempo, el terreno pudo asentarse y eso benefició a la estabilidad del monumento que, de otro modo, se habría dado de bruces contra el terreno toscano.
Volvieron manos a la obra, evidentemente con arquitecto nuevo, en 1272. Levantaron otras cuatro planta pero, con cuidado de ir variando el ángulo, para contrarrestar la inclinación que ya tenían en el brazo románico. Pero de nuevo… ¡parón por conflicto bélico!
Hubo que esperar otros 100 años para que, finalmente, Andrea Pisano terminara el campanario.

Fotografía de Chiara.
3 – Donde doblan las campanas
Pocos saben que la Torre Pendente di Pisa es en realidad el campanario de la catedral de la ciudad, que está situada en la Piazza dei Miracoli. Antiguamente, cuando el arte románico estaba de moda por Italia, el campanario y el baptisterio solían ser independientes y separados de la catedral (El Duomo de Florencia también lo tiene separado). El campanario del Duomo de Santa María Asunta, está dotado con siete campanas y cada una de ellas corresponde con una de las siete notas musicales. La mayor de todas fue instalada a mediados del siglo XVII y la torre, entonces, decidió torcerse hacia el otro lado, concretamente al sur.
4 – Restauraciones y más restauraciones
Ya comentábamos que, desde el principio, la Torre de Pisa fue un ejercicio de funambulismo, en un intento desesperado por ganarle el pulso al equilibrio y la ley de la gravedad. Las intervenciones no han parado en ningún momento y algunas han tenido que ser tomadas de urgencia, por malas decisiones que empeoraron aún más la erección de la torre pisana.
Es el caso de lo ocurrido en pleno siglo XIX, cuando el arquitecto Alessandro Della Gherardesca andaba restaurando el monumento. No se le ocurrió otra cosa al reputado hombre que trazar un caminito para que el público pudiese contemplar la base del campanario. Pero para llevar a cabo sus planes había que excavar alrededor de la torre. ¿Consecuencia? Una inundación y más inclinación.
La situación ha llegado a ser desesperada y peligrosa en más de una ocasión. Pero ya en 1964, el Gobierno italiano se vio obligado a pedir ayuda internacional para tratar de atajar lo que parecía la crónica de un derrumbe anunciado.
5 – Un problema mundial de más de 20 años
En la década de los 60 del siglo pasado, desesperados por el aspecto que había tomado la situación, un importante número de eruditos en historia, arquitectura y matemáticas, entre otras especialidades, se reunieron para idear formas de atajar el problema de la inclinación de la torre. Estuvieron 20 años intentándolo… ¡sin resultados!
La cosa no estuvo en que no se devanaran la sesera, al contrario. De ese cónclave permanente salieron muchas ideas que se llevaron a la práctica: congelación del subsuelo con hidrógeno, refuerzo de hormigón en la cimentación, tensores de contrapeso de plomo de casi 700 toneladas, fijación a través de dos cables de acero de casi 4000 kilos cada uno… Al final la Torre de Pisa se inclinó tanto que tuvo que ser cerrada al público a principios de 1990, ante el riesgo de derrumbe y el peligro que suponía para los visitantes.
El monumento pisano se dejó por imposible hasta que, nueve años más tarde, se consiguió experimentar con una nueva técnica. Entre 1999 y 2001 se extrajeron, mediante un complejo sistema de tuberías, más de 60.000 kilos de arena debajo de la misma torre, lo que dejó espacio suficiente para que pudieran enderezar el edificio.
La inclinación actual no llega a los 6 grados y es, poco más o menos, la misma que tenía en el siglo XVIII. En junio de 2001, el conjunto de la Plaza del Duomo de Pisa, Patrimonio de la Humanidad, volvía a habilitar al público con aforo muy limitado su peculiar campanario. Según los expertos ya no existe algún peligro para los visitantes y la Torre de Pisa aguantará en pie al menos un cuarto de milenio.

Fotografía de Stefano Montagner.
6 – La Leyenda de Galileo
Hay quien dice que es verdad pero no existe nadie para atestiguarlo, excepto el testimonio de un pupilo del gran Galileo Galilei, quien aseguró que su maestro subió hasta el último peldaño de la Torre Pendente, para lanzar dos proyectiles de cañón con diferente volumen. La intención del físico pisano era demostrar que la masa nada tenía que ver con la velocidad de caída. Lo cierto es que esta anécdota es para muchos una leyenda urbana, visto que la Torre no es suficientemente alta para apreciar la diferencia de caída.
7 – Final de un mito
Con la construcción de la Capital Gate de Abu Dhabi, se nos cayó el mito del torreón más inclinado del mundo que, durante siglos conservó la Torre de Pisa. Sus más de 5º de inclinación nada tienen que hacer con los 18º del moderno edificio de Emiratos Árabes.
8 – No es la única Torre que pende en Pisa
En Pisa los ingenieros no se daban por vencidos, y para demostrar a todos los Cristianos que era posible tener el campanario más alto de la ciudad, a menudo tomaban decisiones muy arriesgadas, sin considerar que el suelo de arcilla y arena típico de Pisa no podía permitir erigir torres.
Es el caso de la iglesia de San Miguel de los Descalzos, en donde la Torre de su campanario del siglo XII tiene un inclinación más que apreciable.
La misma suerte le tocó a la iglesia de San Nicola, cuyo campanario tiene una pequeña inclinación.
9 – Una Torre ¡de Película!
La torre de Pisa se convirtió en un icono mundial a causa de su hermosura, pero sobretodo como símbolo de la lucha contra las layes de la naturaleza… o como símbolo de la “idiotez” de los ingenieros 🙂
No es un caso que la Torre aparece en muchas de las películas italianas desde las neo-realistas, hasta en “Amici miei”, comedia italiana de los ’80 traducida al castellano en “Habitación para 4”.
También aparece en la película Superman III, en donde el superhéroe consigue ponerla recta… quitándole toda la magia.
10 – Torre vetada a los Pisanos
La Torre de Pisa recibe millones de turistas que vienen de todo el mundo y que pagan 18 € para subir a su cumbre a través de sus 296 escalones muy resbaladizos, pero nunca son los ciudadanos locales de la milenaria urbe de Pisa. Los Pisanos no pueden subir porque les trae mala suerte… y porque desde la torre no se puede admirar lo más bonito de Pisa su símbolo: la misma torre!
Por si quieres subir, lo mejor es que compres los billetes con mucha antelación en esta página web oficial. El horario es de 9h a 18h todos los días.
Por si no queréis subir a la torre, os vamos a revelar un secreto.
Hace poco en Pisa han reconstruido el camino de la muralla, un camino que da la vuelta al centro histórico completo de Pisa, unos 10 km de camino.
Uno de los puntos de acceso está detrás del baptisterio,. De allí podrás sacar las mejores fotos de la torre de Pisa desde diferentes ángulos, visto que la muralla rodea la torre.
La subida a la muralla es mucho más barata, actualmente cuesta apena 3 Euros!!
11 – Algunas cifras que debes saber sobre la Torre de Pisa
Si es por cifras, la Torre de Pisa no se queda en paños menores. Aquí tienes algunos datos para fardar como un pitagorín cuando vayas a visitarla.
- Esa preciosa mole de campanario de estilo románico, pesa casi 15.000 toneladas.
- Tiene más de 58 metros de alto desde la base y sobresale unos 55 metros desde el suelo.
- Puedes subir a la Torre de Pisa sorteando los 296 escalones de su escalera de caracol, a través de sus 8 plantas.
- El campanario de la catedral de Santa María Asunta tiene en la actualidad 4,5º de inclinación, lo que supone alrededor de un 10%
- El diámetro exterior de la base es de casi 20 metros y el anillo base cubre una superficie de unos 285 metros cuadrados.
- La campana más grande, denominada L’Assunta, fue colocada en 1655 y pesa 3.500 kilos.
12 Y no hemos terminado…
Por último te dejamos otra curiosidad sobre la Torre de Pisa… Pocos saben que el mármol que se utilizó para su construcción se ha extraído de la cercana Ciudad de los vecinos de Lucca… y los Pisanos se lo robaron para construir el complejo de la “Plaza de los Milagros”, que incluye:
- Baptisterio (nacimiento)
- Catedral y Campanario (la vida)
- Campo Santo monumental (la muerte)
Por cierto… si estás buscando un sitio para dormir cerca de la torre te aconsejo visitar esta página!